Wednesday, August 26, 2009

Thursday, August 13, 2009


Marguérite Yourcenar,
Alexis o el tratado del inútil combate


La música me ponía en un estado de entumecimiento muy agradable, un poco singular. Parecía como si todo se inmovilizara, salvo el latir de las arterias; como si la vida hubiera huido de mi cuerpo y fuera muy bueno estar tan cansado. Era un placer, era casi un sufrimiento. Durante toda mi vida he pensado que el placer y el sufrimiento son dos sensaciones muy parecidas; supongo que cualquier persona de naturaleza reflexiva pensará igual.